domingo, octubre 12

Los dinosaurios en la cultura popular española y portuguesa (16)

por Heraclio Astudillo Pombo, Universitat de Lleida

Los dinosaurios en los medios de comunicación, españoles, más populares: la prensa periódica, el cinema, los cromos y los tebeos.
Segundo periodo: de 1900 a 1919, inclusive
(Continuación, 9ª parte).


 

Introducción:

La revista ilustrada, madrileña, Por esos mundos, publicó el 1 de septiembre de 1910, en sus páginas 607-609, un nuevo artículo sobre dinosaurios americanos, titulado "Reptiles de hace 3 millones de años", que resulta muy chocante, tratándose, precisamente, de dinosaurios, reptiles muchísimo más antiguos. Estaba firmado por José del Perojo*.
Se daba cuenta, a los lectores, de que el Museo Americano de Historia Natural de Nueva York, acababa de añadir a sus extensas y maravillosas colecciones paleontológicas con dos esqueletos de un nuevo género de "dinosaurios de pico de pato", pertenecientes a la familia de los Tracodóntidos. Se aportaban detalles científicos sobre cuestiones anatómicas, de parentesco, cronológicas, sobre supuestos hábitos de vida o sobre organismos acompañantes. Todas estas informaciones debieron contribuir al enriquecimiento de la cultura dinológica de los lectores, castellanohablantes, de aquella época que tenían acceso a esta revista dedicada a la divulgación cultural, amplia.

Se ha conservado la ortografía original, como indicio de que el lenguaje también se transforma con el paso del tiempo y se va adaptando a ciertas convenciones, es decir, evoluciona y como en el caso de los fósiles, también las características de un texto pueden ser usadas para inferir la antigüedad de un documento.



Reptiles de hace 3 millones de años


El Museo Americano, de Nueva York acaba de enriquecer sus admirables colecciones de fósiles con dos esqueletos de dinosaurios verdaderamente magníficos, únicos en su género, descubiertos en Montana (Estados Unidos).

Como es sabido, los dinosaurios, son esos reptiles fósiles de tamaño gigantesco, conocidos también científicamente, con el nombre de paquidópodos, cuyos cuatro órdenes de saurópodos, estegosaurios, ornitópodos y terópodos, nos hablan con penetrante elocuencia de las primeras épocas del planeta; épocas de ruda grandeza en que las especies animales como las vegetales, respondiendo condiciones físicas del globo adquirían proporciones monstruosas de las que aún son remedo las del elefante actual.

Los dos nuevos dinosaurios gigantes del Museo Americano de Nueva-York.
Las osamentas de estos animales antediluvianos datan de hace 3.000.000 de años, y han sido halladas en Montana (EE. UU.).
  

Lo más interesante de los dos ejemplares de dinosaurios del Museo neoyorquino, montados y maravillosamente restaurados por los disecadores de dicho establecimiento, es, sin duda, el perfecto estado de conservación osteológica en que se encuentran, y merced al cual puede apreciarse hasta en sus más insignificantes detalles, la morfología de estos terribles lagartos del periodo cretáceo, que tuvieron por coetáneos á los fantásticos animales llamados pterodáctilo, plesiosauro, ignanodón y megalosauro. 
Ambos dinosaurios, clasificados como pertenecientes a la familia de los Tracodóntidos, fueron descubiertos entre las rocas de varias formaciones geológicas que cubren un largo periodo de la historia de la Tierra, hasta la terminación del periodo cretáceo, cuya antigüedad hacen remontar los geólogos á unos 3.000.000 de años.
Estos dinosaurios, cuyos restos más ó menos mutilados se van descubriendo en las rocas del periodo cretáceo en Inglaterra y Hungría, son sobre todo frecuentes en la América del Norte, regiones oriental y occidental de los Estados Unidos, y en el sudoeste del Canadá. Con ellos vienen á flor de tierra restos de plantas y de frutos, fosilizados, que al ser comparados con las plantas y frutos actuales, nos permiten de terminar de una manera bastante aproximada las condiciones climatologicas de pasadas edades de la Tierra. En el hallazgo de Montana las hojas de palmera, los higos chumbos fósiles y las hojas de plátano que en gran cantidad rodeaban los restos de los dinosaurios, evidencian que el clima de lo que ahora lleva el nombre de Estados Unidos, hasta el Canadá, era cálido, casi tropical, al término del referido periodo cretáceo. 

El grabado presenta dos curiosas reconstituciones de los monstruosos reptiles, hechas en el Museo Americano de Nueva-York
 

Los dinosaurios de que nos ocupamos eran animales acuáticos; su talla, á juzgar por los ejemplares del Museo de Nueva York, debía exceder de los seis metros, y como, rasgo peculiar de su morfología presentaban una curiosa conformación de las mandíbulas, semejante al pico del pato. Lo que parece venir á demostrar una vez más que las aves cuentan al reptil entre sus ascendientes. La boca de estos monstruos estaba guarnecida por mil dientes dispuestos en apretadas hileras a modo de pavimento, 500 en cada mandíbula, y en filas de 45 a 60, según la edad y las especies. Su alimento debía consistir en plantas y animales acuáticos.



Algunos detalles y actualizaciones, interesantes

Se han añadido, en forma de texto, enlaces e imágenes, algunas informaciones recientes, que hemos considerado convenientes y necesarias para actualizar y contrastar la información contenida en el artículo original.

Restauración pictórica de dos ejemplares de "dinosaurios con pico de pato" del género Trachodon. Esta representación fue realizada por el paleoartista Charles Knight, bajo la supervisión del profesor Osborn. Se intentaba reflejar las últimas evidencias científicas, de aquel momento histórico, en cuanto a la posible forma externa, estructura interna y poses características de estos animales  o sus probables hábitos y medio ambiente típico. Dispuestos en una posición muy semejante a la del montaje expositivo de los dos esqueletos exhibidos en el AMNH de New York
Imagen: Wikipedia 

La misma pareja de esqueletos de "dinosaurios de pico de pato", de 1910, fotografiada en la actualidad. El montaje expositivo todavía es mismo con el que fueron exhibidos en el AMNH de New York, a principios del s. XX. Una diferencia notable pero que no resulta visible, a primera vista, es que ahora en el rótulo identificativo se ha sustituido el antiguo nombre genérico de Trachodon por el nuevo de Anatotitan,
Imagen: Anatotitan

"Anatotitan body adaptations"

Fragmento de vídeo (2:34) de la serie audiovisual "Dinosaurs", de Discovery Chanel, en el que se muestran y comentan las adaptaciones ecológicas de los dinosaurios del género Anatotitan.
 
* José del Perojo y Figueras fue un filósofo, periodista, escritor, traductor y pensador político, español, oriundo de Cuba, de ideología liberal-reformista, perteneciente al movimiento del Regeneracionismo español.


Fundó y dirigió, con éxito, varias revistas, una de ellas fue "Por Esos Mundos", publicación muy citada y utilizada en esta sección. Publicó artículos sobre temáticas muy diversas, incluidos los de contenido científico, en multitud de diarios y revistas de su época.


2 comentarios:

ome dijo...

¿De dónde sacaría lo de 3 millones de años?

Astu dijo...

Error inexplicable y misterio insondable, pues es evidente que no se trata de una simple errata, de responsabilidad ajena, debida a un tipográfo descuidado...
Este fragmento lo deja bien claro:
"hasta la terminación del periodo cretáceo, cuya antigüedad hacen remontar los geólogos á unos 3.000.000 de años."
Como tú bien sabes, a principios del siglo XX, los buenos geólogos, ya situaban el final del Cretácico, hacia épocas muchísimoo más lejanas en el tiempo.